Separados...pero unidos por el mismo recuerdo
Conocí a Zak tal día como hoy en la celebración de las fiestas de un pueblito cercano al mío, en uno de los días más lluviosos que recuerdo de mediados de septiembre, con el verano a punto de terminar. Mis amigas y yo, a pesar de la lluvia quisimos ir a unas fiestas que siempre nos habían traído buenos recuerdos por diversos motivos y a las que no faltábamos ningún año.
La lluvia chafó gran parte de las actividades, se suspendieron los fuegos artificiales y la orquesta dejó de tocar mientras escampaba. Nos refugiamos en un viejo cobertizo y fue entonces cuando noté que ya no llevaba el bolso...
Corriendo bajo la lluvia regresé a la plaza donde minutos antes no cabía un alma por si se me había resbalado con las prisas. Allí no había nada, ni nadie, sólo un chico empapado que llevaba algo en la mano.
Al verme buscando algo, se acercó a mí y pude ver que lo que llevaba en la mano era mi bolso. Mi bolso de tela totalmente empapado y hecho un pingajo. Me contó cómo había visto que se me resbalaba sin darme cuenta y que estaba a punto de llamar al número que había encontrado en mi monedero para dar con mi paradero.
Esa fue nuestra primera conversación. Y fue durante esos cinco minutos cuando algo que jamás había sentido me empezó a oprimir el corazón. Me sorprendió lo rápido que me fascinó.
Este fin de semana, he vuelto a esas fiestas, y volví a recordar aquel comienzo, aquella dulzura, y los meses que siguieron. Y ví la plaza vacía sin él, hasta que un mensaje suyo la volvió a llenar, y sonreí. Porque él también se acordó y pensó en mí. Y ese mensaje me alegró la noche.
5 comentarios
Rocio -
Alba -
Sabes? lo bonito es haber vivido eso, yo siempre pienso que mejor que sucediera y que se acabara antes de que nunca ocurriera.... así puedes sonreir cuando ese recuerdo te invada aun con un toque melancolico.
Un beso preciosa
Pijomad -
ELRAYAn -
Su -
Qué guay que recibieses ese mensaje :-)
Un abrazo