Hace frío junto al río
Fin de semana de escapada. La capital me escuece muchas veces y necesito salir de vez en cuando. El frío intenso de la madrugada cada vez hace más mella en mí, que me pregunto porqué no soy la misma de antes, la que tenía capacidad de aguante, la que reía más y la que veía las cosas más positivas.
Aunque las cosas van bien, parece que siempre me acompaña un halo de melancolía donde quiera que vaya, tengo miedo de que mi alma de rompa como un vaso de cristal que se estrella contra el suelo, de que mi mundo en equilibrio se precipite por algún lado de la balanza.
Caminando por las estrechas calles del centro a paso lento, me detuve a contemplar la catedral iluminada, la quietud, la noche y el frío le daban un aire de novela. Y me acordé de la escapada que nunca hice con una persona en la que creía. Porque yo estaba allí, como dije, y él no.
El taxi me dejó cerca de la casa y retrasé mi llegada. A pesar de los pinchazos que amenazaban con romper mi cabeza, me fumé un cigarro junto al río. La ciudad estaba muerta, contrastando con el ambiente que dejé en el bar. Me gusta regalarme pequeños momentos como ese, contemplando un paisaje que nunca había visto, y me acordé de unas palabras dichas hace tiempo. Cuando aún creía en él. Quizá ya no quede nada de eso, o quizá sí. Sólo es un quizá y no una certeza, pero la persona en la que yo creía no se dedicaba a hacer daño de manera gratuita a aquellos que le quieren, y que quizá con esto, dejen de quererle.
9 comentarios
Mar de Luna -
Las escapadas así sientan taaaan bien!!
Besazos guapa!
Elena -
ELRAYAn -
Tu vida sufre transformaciones y tú con ellas.
Sobre la última frase ya dije demasiado.
Tengo ganas de hablar contigo sobre este post.
Yo tb viví un Salamanca paralelo.
MUAKS!!!!
Luna -
Un besito
Sara -
Yo suelo hacer cosas de esas, regalarme momentos. Y cuando uno está un poco tonto, fumarse un cigarro viendo algo bonito es lo mejor que hay; el sentirse con uno mimso, que eso es lo que realmente nunca te falla.
Pero después del cigarro... ARRIBA! No hay que dejarle ni un huequecito más a la melanclía, que sino... invade!
Un besazo guapa!!!
susana -
CaNaLLa -
Todo tiene su momento y su por qué...
¡Me encanta que te regales momentos!, yo trato de hacerlo también cada día...
Un beso, muak!
Cora -
Manuel -
Una fecha, el frío, un evento, cualquier cosa despierta en nuestra memoria los fantasmas del pasado, a veces provocando una sonrisa, a veces causando honda tristeza, o haciéndonos esa pregunta de "¿Qué habría ocurrido si,,,?"
Es curioso, pero este sábado, con bastante frío por cierto, estuve con mi mujer en la boda de un primo suyo, y mientras todo iba sucediendo, iba recordando mi vida sentimental pasada, en la que hubo de todo...
Un saludito desde Valencia.