Bifurcación
Toni y yo ya no trabajamos juntos. Un puesto mejor en otro lugar han sido las causas de nuestra separación, esta vez laboral.
Cuando me lo contó, al igual que en estos meses, mis reacciones fueron contradictorias, con su marcha, las posibilidades de un acercamiento se reducen. Ambos sabemos que “fuera” la relación va a ser casual, que sólo cuando coincidamos por la calle o en el parque, o en algún bar volveremos a hablar, así que ahora todo está en manos de la casualidad. Casualidad que durante estos meses de verano es más que probable porque pasamos el verano cerca, pero que se reducirá con la llegada de septiembre.
Sin embargo, me siento bien, es como si me hubiera quitado un peso de encima. Ante mí ahora se abren otros caminos, y otras ilusiones y sólo dejando a Toni por el camino podré dejar de pensar en él, como ya lo había hecho antes.
Hoy sin embargo, me he detenido un momento en el umbral del que fue su despacho, ahora vacío y con unas cuantas cajas a medio montar en una esquina, y mientras lo recorría con la mirada, mentalmente ponía un punto y aparte a la melancolía. Y pronto, será un punto final.
3 comentarios
Alba -
Toma aire, respira fuerte...porque lo que tenga que ser, será!!!!!!!!!
Un besoteeeeee
Dianuka -
ELRAYAn -
Los puntos finales siempre se transforman en puntos y aparte. Pero bueno, todo consiste en pasar al siguiente párrafo enseguida.
Un beso.